Sin duda alguna, conducir un vehículo Mazda, no tiene comparación alguna. Cada pieza de la marca japonesa es auténtica, genuina y se compone del mejor equipamiento y tecnología para hacer del andar algo liviano, seguro y placentero.
Mazda se centra en ofrecer el equilibrio perfecto entre un diseño exclusivo y elegante en conjunto a los mejores parámetros de confort, seguridad, tecnología y conectividad.
Realizar un test drive Mazda, es sumergirse en una experiencia única, que eleva todos los sentidos a disfrutar de un viaje único. Cada detalle del vehículo se amoldan al conductor haciendo que se sienta una propia extensión del cuerpo humano.
A continuación, presentamos 5 de las más destacadas diferencias que pueden notarse al subirse a un auténtico vehículo Mazda y que ninguna otra marca puede llegar a superar:
Mazda cree que un auto debe despertar emociones, a la hora de manejarlo el vehículo debe ser un complemento de tu propio cuerpo. Debe inspirar y emocionar a la persona que lo conduce.
Los Mazda son vehículos que piensan y sienten como el conductor y sus pasajeros. El suave roce de las manos al volante y la comodidad de los tapizados suman al ambiente una hiperconectividad casi natural, que permiten al conductor estar al tanto de todo aquello que necesita, sin necesidad de desviar su atención de la carretera.
En lugar de enfocarse en la mecánica del vehículo, su origen y desarrollo está focalizado en las personas. Lo importante es el manejo y qué produce en las personas.
Para ello, ingenieros y Takumis Mazda, trabajan en innumerables estudios sobre sus características y conductas para diseñar un vehículo que funcione en armonía con el conductor. Obteniendo como importante resultado un vehículo que se siente como una extensión del cuerpo, con una dirección más precisa, mejor control y menos fatiga.
En el preciso instante en que te encuentras frente a un modelo Mazda, reconoces su impronta por la capacidad absoluta de dejarte atónito ante tanta belleza.
Ya su exterior materializa conceptos del diseño Kodo, deslumbrando por su juego de luces y sombras que se apropian de toda la carrocería. Al verlas, uno experimenta la sensación de ser partícipe de una obra de arte que se gesta en cada movimiento, como si el lienzo fuese el creador de las imágenes producidas por los espacios de luz y sombra.
Los colores Mazda son también objeto de deslumbramiento, ya que son el resultado de un trabajo arduo y minucioso para alcanzar el tono ideal. Capas de color, logradas por los Takuminuri, ofrecen el acabado perfecto.
El viaje con un vehículo Mazda comienza mucho antes de encender el motor, inicia en el momento exacto en el que la persona hace contacto con el auto. Ya cautivado por su exterior, el tacto es el punto de partida hacia un viaje inigualable. Introducirse, es viajar por los aromas, colores y superficies exclusivas que ofrece Mazda.
Se trata de un viaje a través de los sentidos, que ofrece plena comodidad y satisfacción a cada uno de sus ocupantes. Porque cada espacio y detalle que hace al vehículo, está pensado y trabajado por la pasión y los valores de manos artesanas para el bienestar de las personas. Respetando la belleza de los espacios vacíos que generan mayor admiración hacia cada pieza del vehículo.
Mazda ha creado una filosofía de desarrollo centrada en el ser humano: Skyactiv-vehicle dynamics con G-Vectoring Control. A través de ella busca desafiar los conceptos convencionales de dinámica de vehículos de manera radical.
La filosofía Jinba Ittai se extiende a todos los modelos de Mazda a través de un diseño que permite una posición de conducción sobresaliente. El concepto involucra a la ingeniería que se refleja en elementos como una dirección precisa y un acelerador que responde exactamente a las intenciones del conductor.
Para lograr esta armoniosa integración, Mazda trabaja constantemente sobre sus motores, suspensiones y transmisiones pretendiendo un rendimiento superior al de sus competidores. Un claro y eficiente ejemplo de ello es su propio y exclusivo sistema G-Vectoring Control.
Esta tecnología busca una mejor experiencia para el conductor y acompañantes mediante una nueva forma de entender la asistencia a la dirección y ofrecer un mejor desempeño en curva y una menor necesidad de correcciones sobre la dirección durante los giros.
El motor Mazda, es capaz de un excelente control de torque, o más específicamente un control de tracción minucioso, pieza clave de la dinámica G-Vectoring Control.
Tanto la suspensión, como la carrocería, los asientos y la dirección hacen al conjunto de sistemas excepcionales y son quienes se encargan de transmitir la operación del conductor a todo el vehículo.
Los vehículos Mazda se equipan de diferentes tecnologías que colaboran para disfrutar de la mejor conexión. Un ejemplo clave es el sistema de infoentretenimiento Mazda Connect y computador a bordo, lo que posibilita al conductor tener todo al alcance de su vista, sin necesidad de dispersarse, para lograr mayor comodidad y concentración en su conducción.
Los maestros Takumi de Mazda depositan toda su pasión en la realización de cada pieza modelada de los vehículos. Solo las manos de un artesano pueden transmitir verdadera alma a su creación. El diseño Kodo -filosofía por la que se guía Mazda- transmite vida y personalidad a cada auto.
Son las manos artesanas aquellas capaces de trabajar los mejores materiales para los vehículos Mazda que no sólo generan mayor comodidad, sino que además hacen del vehículo, un espacio acogedor. Como por ejemplo, los tapizados y volantes cubiertos de cuero que irradian elegancia y ofrecen una impronta única a los modelos Mazda 3, Mazda CX-9, entre otros.
Mazda crea piezas únicas que no sólo destacan por su belleza, sino también por su elevado nivel tecnológico, capaz de trabajar conceptos como la comodidad, el confort, la unión del vehículo con su conductor, la fatiga, la delicadeza y todo aquello que eleve por completo la experiencia de manejo.
Agenda tu test drive y anímate a la maravillosa experiencia de conducir un vehículo Mazda.